
Somos, literalmente, polvo de estrellas. Todos los atomos de nuestros cuerpos estuvieron alguna vez en el infierno de una estrella en explosión. Cada uno de ellos ha vivido innumerables y agitadas vidas. Estaban ahí en el comienzo de los tiempos y sobrevivirán a la desaparición de la Tierra y el sistema solar. El átomo de oxigeno que ahora mismo estás respirando, pudo haber sido parte del último aliento de César o de la primera criatura que caminó sobre nuestro planeta. Este libro traza la historia de un átomo de oxígeno desde su formación un tiempo después del Big Bang y su paso por la aventura de la vida en la Tierra hasta perderse en la eternidad, además de la historia de todo el Universo, osea, nuestra propia historia. Y lo hace con la habilidad de Carl Sagan de expandir la imaginación y explicar los misterios del Cosmos de forma asequible y clara y de una forma tan amena y entretenida que el libro se lee como una buena novela.